El culto del Napoli a Maradona es una de las principales razones para planificar un viaje de fútbol a Nápoles. Pero, ¿cuál es la conexión entre el jugador argentino y el club italiano?
El advenimiento de una estrella
Era como la llegada de un dios. Cuando Diego Armando Maradona fue presentado como nuevo jugador del Napoli, más de 75.000 fanáticos llenaron el Stadio San Paolo. Sintieron que su nuevo ídolo llevaría a su equipo a una nueva dimensión y sus esperanzas se hicieron realidad.
Todo comenzó en el verano de 1984, cuando fue fichado por el Napoli por el equivalente a 8 millones de euros tras dos años algo decepcionantes en el FC Barcelona. Cuando Maradona llegó a Nápoles, inmediatamente se convirtió en un ícono. La vitrina de trofeos del Napoli no estaba llena de trofeos en este momento, pero eso pronto cambiaría bajo la guía de la estrella argentina.
Los equipos del sur, infravalorados
Históricamente, los clubes del norte han dominado la escena del fútbol italiano. La década de 1980 no fue la excepción. Cuando Napoli fichó a Maradona, los habitantes de Nápoles sentían que eran tratados como ciudadanos de segunda clase, en comparación con las ciudades del norte. Este sentimiento también se tradujo en el fútbol, donde clubes como la Juventus, el AC Milan o el Inter miraban al Napoli y al resto de clubes del sur por encima del hombro. Antes de la llegada de Maradona, Napoli solo había tenido poco éxito en la Coppa Italia, pero ganar la Serie A era solo una fantasía salvaje e inalcanzable.
Maradona se convierte en héroe
Después de una primera temporada difícil, Maradona llevó a Napoli al tercer lugar un año después, justo antes de la Copa del Mundo de 1986. Fue un emocionante preludio de lo que vendría. Durante ese verano en México, Maradona jugó como nunca antes, anotó dos goles memorables contra Inglaterra y finalmente ganó el torneo con Argentina. Cuando regresó a Nápoles, la ciudad vio hecho realidad su mayor sueño. Napoli superó a Juventus e Inter y se convirtió en campeón de la Serie A por primera vez. No solo eso, también ganó la Coppa Italia, venciendo a Atalanta en la final.
La época dorada del Nápoles
No solo Napoli se convirtió en uno de los mejores equipos italianos del momento, la ciudad también se transformó bajo Maradona. Guiados por el ídolo argentino, los Gli Azzurri vivieron una época dorada, ganando la Copa de la UEFA en 1989 y otro título de la Serie A en 1990. Para el Nápoles, también se sintió como una venganza, después de todas esas temporadas negativas contra los clubes del norte. Incluso el AC Milan intentó fichar a Maradona, pero se mantuvo fiel al Napoli. En general, marcó 78 goles en 115 partidos en siete temporadas, ganando cuatro títulos para los Partenopei. Fue en Nápoles donde Maradona se convirtió en uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos.
Sus logros son más impresionantes considerando que la Serie A era la mejor liga europea en ese momento. Los equipos gastaron mucho en la década de 1980 para atraer a los mejores jugadores del mundo, y los clubes estaban repletos de talento. Platini, Zico, Van Basten, Gullit o Matthäus son solo algunas de las muchas estrellas que actuaron en Italia.
Corazón dividido
Uno de los partidos más memorables de Maradona en San Paolo sucedió cuando jugaba para Argentina. Estaba jugando las semifinales de la Copa del Mundo de 1990 contra Italia en Nápoles, y pidió a los fanáticos locales que lo alentaran a él, en lugar de a los anfitriones. Pero era mucho pedir. Los hinchas del Napoli desplegaron pancartas que decían que “Maradona está en nuestros corazones, pero Italia es nuestra patria”. Al final, Argentina ganó el partido en la tanda de penales tras un empate 1-1, en uno de los mejores encuentros del torneo. Perderían la final contra Alemania.
La muerte de un ícono
Maradona tenía 60 años cuando murió en 2020. Y su pérdida se sintió profundamente en todo el mundo del fútbol, especialmente en Nápoles. Fue la muerte de un futbolista de leyenda, el que llevó al Napoli a lo más alto. De hecho, el Nápoles no gana la Serie A desde entonces, e incluso descendió a la Serie C tras graves problemas económicos. Inmediatamente después de la muerte de Maradona, la ciudad y el club acordaron que el Estadio Stadio San Paolo pasara a llamarse Stadio Diego Armando Maradona. El amor de Nápoles por Maradona nunca se disipó después de abandonar el Napoli en 1992.
Qué ver en un viaje de fútbol a Nápoles
En una ciudad donde Maradona es venerado como un santo, es un pecado escapar de sus numerosos homenajes que pueblan Nápoles. Encontrarás muchos homenajes en las calles de Quartieri Spagnoli, desde enormes murales hasta diminutos altares. Por no hablar de los numerosos graffitis, figuritas y camisetas. Puede que Nápoles no sea la ciudad más bonita del mundo, pero sin duda es un lugar mágico para un aficionado al fútbol.
Eso debería abrirle el apetito antes de un partido de fútbol en el Estadio Diego Maradona. Es un enorme estadio ubicado en el barrio de Fuorigrotta, con capacidad para 55.000 aficionados. Fue construido originalmente en 1959 y ha sido ligeramente renovado desde entonces. Si compras una entrada para las dos secciones de Curva, detrás de cada una de las porterías, estarás rodeado de la afición más apasionada del estadio. El estadio puede parecer un poco viejo y oxidado, pero eso es parte de la belleza. Vivirás uno de los mejores ambientes del fútbol europeo. Además, Napoli es ahora uno de los mejores equipos italianos en este momento.
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